Blogger news

gadgets para blogger
LaIslaDeLosBlogs

La frase...

"Te lamentas continuamente de cosas que dejaste de hacer o que hiciste mal en el pasado, como si eso sirviera ahora de algo. ¿Por qué no te perdonas y aceptas que hiciste lo mejor que sabías en cada momento y lugar?, tienes derecho a evolucionar."

sábado, 29 de junio de 2013

Lo bueno, dura poco.

Solemos pensar que lo bueno, siempre dura muy poco, y a penas nos queda tiempo de disfrutarlo, pero esta realidad es así, porque nosotros lo hemos creído y querido.
Recuerdo que de pequeña, mi mamá solía llevarme a almorzar a una cafetería que quedaba en un centro comercial muy conocido en mi país; Esta cafetería era sumamente popular por sus postres y cafés, y no necesariamente por sus platos fuertes; La mayoría de niños alucinaban pidiendo porciones de pastel con chocolate, fresa, caramelo, donas rellenas, y una infinidad de comidas repletas de azúcar. Aunque a mi también me gustaban mucho estas cosas, siempre que tenía la oportunidad de ir y ordenar algo en dicha cafetería, pedía lo mismo: un croissant de jamón y queso. Era probablemente de lo más sencillo que había en la cafetería, sólo se trataba de dos mitades de pan en forma de media luna, rellenas de queso, jamón, tomate, lechuga y aderezo, eso era todo, pero para mi era comida de dioses; Aún hasta el día de hoy sigo disfrutando mucho de esos croissants. 

Una tarde estábamos con mi mamá precisamente en esa cafetería, tendría yo unos siete u ocho años quizá; Ella tomaba un café con una dona, y yo estaba encantada, comiendo mi croissant. Mi mamá me miraba, muy fijamente, y en cierto momento me preguntó:

- ¿Por qué das mordidas tan pequeñas y comes tan lento? ¿acaso no te gusta?

Creo que jamás me había percatado de que me comía extremadamente lento esos croissants, quizá era subconscientemente, pero en definitiva no era porque no me gustara, al contrario, lo disfrutaba tanto que deseaba que esa delicia jamás terminara, y comiendo lento, extendía mi placer. Claro, eso sólo lo entendía yo de pequeña, para los demás significaba que probablemente no me gustaba aquél platillo, y me veía forzada a comerlo de mala gana. Incluso hoy, cuando algo me gusta, ya no tengo aquella paciencia que tenía de niña, simple y sencillamente trago, y a penas me tomo el tiempo de disfrutar lo que ingiero. 

¿Se han dado cuenta de que cuando algo nos encanta demasiado, solemos "atragantarnos" con ello?, y no sólo me refiero a las comidas, aunque es un magnifico ejemplo. Lo mismo pasa con las relaciones, cuando disfrutamos de una, estamos tan entusiasmados, que solemos desgastarla demasiado rápido, en vez de tomarnos nuestro tiempo, y disfrutarla lentamente, dejarla crecer a su paso, y convertir el sentimiento en algo duradero, y no pasajero.

Los seres humanos muy pocas veces solemos controlar nuestros impulsos, solemos caer fácilmente en el salvajismo, y todo aquello que nos gusta suele ser víctima de ese salvajismo que nos caracteriza.

Solemos pensar que lo bueno, siempre dura muy poco, y a penas nos queda tiempo de disfrutarlo, pero esta realidad es así, porque nosotros lo hemos creído y querido, así acostumbramos a actuar, impulsivamente, aceleradamente... pareciera una carrera, pero en realidad, nadie nos va persiguiendo ni apresurando. 

"Todo lo que sube, tiene que bajar", es un dicho muy popular, pero me pregunto, ¿por qué las cosas tienen que estar o muy arriba o muy abajo? ¿por qué no puede haber un punto medio? en el que se nos permita disfrutar a plenitud de las cosas, las personas, las vivencias y los sentimientos, en donde el tiempo hasta cierto punto se suspenda, en el que vivamos sin prisas, y podamos ser como un niño, que saborea profunda y lentamente cada mordisco que le pega a su croissant favorito.

Sería lo ideal, y no creo que sea tan utópico como suena, siempre he pensado que imposible es una palabra que el ser humano inventó, como consecuencia de su cobardía, y el miedo a enfrentarla; Siempre he pensado que la fuerza radica en la voluntad, y que mientras se tenga voluntad, todo se puede lograr. Sólo es cuestión de proponernos no caer en la aceleración de la vida, que nuestras sociedades nos inculcan, es cuestión de proponerse vivir a nuestro propio ritmo, nadar contra la corriente, ser felices, le duela a quien le duela.

-AdriannaRossi-

miércoles, 26 de junio de 2013

Hipócritas por naturaleza.

Mentiría si dijera que jamás he sido una persona hipócrita y traicionera, ¡claro que sí lo he sido! muchas veces, con muchas personas.
Lo he dicho una y mil veces: los amigos no existen... y si encontramos alguno (lo cual sería sumamente raro) siempre será quién menos pensamos, o a quién menos le brindemos nuestra amistad.  Un conocido me dijo que escribiera sobre esas "amistades" inundadas de hipocresía, sobre esas personas que se acercan a ti únicamente con la intención de destruirte y apuñalarte por la espalda. Suena un poco dramático, pero así lo dijo él, sus razones y malas experiencias tendrá. 

De hecho tiene gran razón, ¿quién no se ha topado en la vida con una de esas personas?, muchos les llaman doble cara, moscas muertas, e infinidad de sobrenombres, yo los defino de una manera más simple, clara y universal: hipócritas. Y aunque suene feo, la verdad es que vivimos en un mundo plagado de hipocresía, me atrevería a jurar que la mayoría de personas que nos rodean son hipócritas, no se muestran a plenitud, y a nuestras espaldas seguro que destilan veneno en nuestra contra. No sé, soy muy desconfiada, la vida me ha hecho así, y no me arrepiento, es un mecanismo de defensa, los años me enseñaron que no es bueno fiarse ni de la propia sombra.

Hay personas que pareciera que no tienen vida propia, porque se la pasan detrás tuyo, criticando cada cosa que haces, dices, vistes, comes... absolutamente todo. Les encanta hacerte quedar mal, sin darse cuenta que en su desesperado intento por esto, los únicos que se ponen en ridículo son ellos mismos, evidenciando su falta de vida, o propósitos y ocupaciones en esta.

Entonces ¿qué hacer para evitar a este tipo de personas que no traerán ningún beneficio a nuestra vida?, pues triste y honestamente no creo que se pueda hacer mucho, ya que como dije anteriormente, vivimos rodeados por ellas, evitarlas es imposible. 

Aunque pensándolo bien, no entiendo por qué nos molesta tanto, si al final de cuentas, todos nosotros tenemos algo de hipocresía, y no me digan que no, porque desde el momento en que lo están negando, ya están siendo hipócritas. Curiosamente a las personas suelen molestarles otras personas con caracteres y actitudes muy similares a las suyas. Al igual que con los indígenas... muchos se ofenden de que los comparen con ellos, negando absurdamente sus raíces y antepasados; Pero no quisiera salirme del tema, eso ya lo comentaré en otra entrada.

La hipocresía es algo con lo que tenemos que aprender a vivir, siempre estará ahí, no podemos evitarla. Lo que si podemos hacer, es no permitir convertirnos en víctimas de ella, ser cautelosos, no confiar en nadie, y tampoco pretender que nadie confíe en nosotros, ya que, aunque no lo reconozcamos, somos igual de hipócritas, cizañozos y peligrosos que el resto, y sí, también sabemos dar puñaladas por la espalda, está en nuestra naturaleza, naturaleza traicionera, así somos los seres humanos, solemos morder la mano que nos da de comer muy a menudo.

Así son las cosas, es bueno hablar de manera clara, sin ánimos de ofender, y honestamente pienso que no podemos renegar y quejarnos de lo que nosotros mismos hacemos. Mentiría si dijera que jamás he sido una persona hipócrita y traicionera, ¡claro que sí lo he sido! muchas veces, con muchas personas; Algunas lo merecía, otras no, pero la hipocresía no margina, y ataca a todos. ¿Que si sigo siendo hipócrita?, claro que sí, aunque no a mayores rasgos... pero siempre hay pequeños detalles en los que destilamos hipocresía, eso es inevitable.

No creo que ser hipócrita me vuelva una mala persona, simple y sencillamente me vuelve una persona más, está en mi naturaleza criticar, está en mi destino ser criticada, así de simple; Lo que si me diferencia de muchos, es que yo sé aceptar lo que soy, no me avergüenzo, admito que soy imperfecta, tengo bien claro que no soy Dios, no soy quién para juzgar, y de igual manera nadie tiene potestad para juzgarme.

Somos hipócritas por naturaleza, esa es una verdad que todos sabemos, pero que nadie se atreve a decir.  A veces, incluso detrás de las buenas intenciones se esconde la hipocresía, como el no atrevernos a decirle a alguien que se ve fatal con específico vestido, o con algún mal corte o tinte de pelo, nos cuesta demasiado decir la verdad, y fingimos estar "encantados" con los cambios. Por muy pequeña o grande que sea la mentira, por muy mal o bien intencionada que sea, no deja de ser mentira, no deja de llevar cierto grado de hipocresía con ella, no deja de ser más falsa que un billete de a dos dólares, son generalidades, verdades que son, y no dejarán de ser.

Nos ofendemos cuando alguien nos dice nuestras verdades a la cara, y sin embargo nos llenamos la boca diciendo que odiamos a las personas hipócritas... ¿entonces qué buscamos? no lo sé.

Aceptemos lo que somos, no lo reneguemos, y no nos quejemos de otros, que al fin y al cabo, sólo nos imitan, que son reflejo y vivo ejemplo de nosotros mismos.

No digo que la hipocresía sea buena, pero si admito que hasta cierto punto, en el mundo en que vivimos es necesaria.  No podemos andar por la vida diciendo la verdad, y nada más que la verdad a todas las personas. No creo que consigamos un trabajo diciéndole al entrevistador que le apesta la boca, tiene los dientes amarillos y está más gordo que el cuchito en el que guardamos los ahorros, ¿verdad?, espero explicarme bien.

No huyamos de lo que somos, no neguemos lo natural.

-AdriannaRossi-

No es obsesión.

Si esto fuera obsesión, hace ya mucho tiempo que me hubiera destruido, hace ya bastante tiempo que nos habría consumido.

No, no es obsesión, ni algún tipo de amor enfermizo, no es un capricho, ni tampoco un vicio... o quizá sí, pero un vicio bueno, de esos que no matan, de esos que construyen. No me haces daño,  me haces bien, tu amor me hace bien, tus besos me alegran, tus brazos me contienen y tus palabras me consuelan, así es.

Una obsesión tarde o temprano te conduce a la perdición, tu en cambio, me ayudaste a encontrar mi camino, me sacaste de la oscuridad en la que estaba, me salvaste del desastroso final al que me dirigía, te convertiste en eso, mi salvador.

Si esto fuera obsesión, hace ya mucho tiempo que me hubiera destruido, hace ya bastante tiempo que nos habría consumido, pero tú lo sabes, y yo lo sé, que esto cariño mío, no se parece para nada a la obsesión, que esto es amor, y amor del bueno. 

Contemplo esto que tenemos, este bello sentimiento que día con día crece, que se hace más fuerte con el pasar del tiempo, que poco a poco, aunque parezca imposible, se va adentrando aún más en el corazón, lo contemplo y me sorprende, me sorprende su belleza, su naturalidad, su pureza y sinceridad. Me sorprende que sea mío, me sorprende que sea nuestro, que nosotros le hayamos dado vida, que nosotros lo hayamos ido tejiendo... ¡Que buen trabajo! que bella obra la que nos hemos creado.

¿Qué tiene que ver esta belleza, con la dañina obsesión? nada, eso tú y yo lo sabemos, pero los demás no lo comprenden, ¿y qué?, ¿qué nos importa?, si al fin y al cabo esto de amar, es sólo de dos, no hay cabida para terceros, no es triángulo, ni un cuadrado... es de dos, y nada más. Y en esta historia ya habemos dos, tú y yo, nuestra bendita fortuna, nuestro  codiciado destino, amarnos.

No importa que piensen y digan que lo nuestro no es más que obsesión, un sentimiento pasajero, una flor que tarde o temprano se marchita, un amor que con el tiempo nos destruye, eso no es cierto, pero ellos no saben, porque no lo viven, porque nunca lo han vivido, y probablemente jamás lo vivirán. Pero es nuestro presente, nuestro destino, nuestra realidad, nosotros si lo vivimos, nosotros si lo sentimos, y con total autoridad podemos gritarles ¡No es obsesión, es un sentimiento real!

Que nos critiquen a mi ya no me importa, ni siquiera importa si todos se van, mientras te tenga, y tenga tu sonrisa, tu calor, tus besos y tus palabras, mientras tenga eso no necesito más.

Grítales amor mío, déjales saber que lo nuestro no es obsesión, si no lo entienden, es su problema, nuestras acciones y el sentimiento hablarán, y sus bocas cizañozas callarán.

-AdriannaRossi-

No lloraré por siempre.

No lloraré por siempre, no lloraré mucho tiempo, las cosas pasan, y el sufrimiento es parte de la vida, parte del amar, un riesgo que me atreví a correr, un riesgo que pagué caro.
Es cierto, has roto mi corazón, es cierto que duele, que me mata y me desgarra por dentro, es cierto que me falta el aire para respirar, que he pensado en acabar con todo, en ya no seguir más con este sufrimiento, es cierto que preferiría estar muerta, enterrada, lejos de mis sentimientos, lejos de estas emociones que me invaden y me destrozan, lejos de estos recuerdos que me desarman y me torturan... son ciertas tantas cosas, tantas razones para sufrir y llorar, y lo admito, en estos momentos lo hago, en estos momentos estoy destrozada, violada, tirada en el suelo, sangrando y esperando la hora de mi muerte; Pero sé que esto es pasajero, esto no es eterno; Sé que me levantaré, me sacudiré el polvo y seguiré adelante, sé que tu traición no dolerá por siempre, sé que sanaré, porque eso es lo que el corazón mejor sabe hacer, sanar. 

Sé que el tiempo traerá con sigo tarde o temprano tu olvido, sé que seré libre de ti, de tus amargos recuerdos y tus crueles mentiras, lo sé. Las cosas pasan, todo pasa, y todo lo que comienza, tarde o temprano llega a un final. Pero soy fuerte, y valgo demasiado... me sobrepondré a este dolor, y te superaré. Mi vida sigue, nada se detiene con tu partida. 

Lo que no te mata, te fortalece, eso es muy cierto, y sé que después de todo esto, renaceré de entre las cenizas, gloriosa como un ave fénix, renaceré más fuerte y poderosa que nunca, renovada, lista para afrontar lo que se venga. Mi corazón renacerá blindado, preparado para todo, pero no frío, no endurecido... listo y dispuesto a amar, con la misma intensidad con la que te amó a ti, pero está vez de manera más cautelosa, más inteligente, más precavida. 

No lloraré por siempre, no lloraré mucho tiempo, las cosas pasan, y el sufrimiento es parte de la vida, parte del amar, un riesgo que me atreví a correr, un riesgo que pagué caro, un riesgo que no me matará, no, en definitiva no lo hará. Creíste que sí, que no podría seguir, que jamás me levantaría, pero te has equivocado. Estoy dispuesta y decidida a olvidarte, superarte y enterrarte muy profundo en el pasado. Estoy dispuesta a no volver a llorar por ti, a luchar por mi... por  amor a mi y a nadie más.

Mañana llegará ya un nuevo amor, uno verdadero, que me cuide y me valore. Uno que diga lo que verdaderamente sienta, y no sólo lo que crea que yo quiero escuchar. Uno que me conquiste por amor, y no por interés. Uno que esté dispuesto a soportar lo bueno y lo malo conmigo, uno que me acepte tal como soy, uno que no pretenda cambiarme, uno que no soporte la idea de lastimarme.

Mañana llegará uno que si merezca ser llamado "mi amor", que sí lo sea, que tenga como misión en la vida conquistarme y hacerme feliz. Uno que se entregue a mi por completo, en cuerpo y alma, lleno de pasión, pasión por mi, por mi carne, por mi alma, por mi vida y mi ser.

Juro que te amé, te amé como jamás había amado a nadie, como jamás creí ni pretendí amar... me enamoré de ti, caí como tonta a tus pies, y lo daba todo por amor a ti. Me arriesgué demasiado, y lo pagué caro, pero de los errores se aprende, y yo ya aprendí suficiente. Juro que no volveré a cometer el mismo error, juro que no volveré a tropezar con la misma piedra, ¡lo juro!

Juro que me amo, me amo más de lo que te amé a ti, y es por ese amor que estoy tan segura y decidida... seguiré adelante, no lloraré por siempre.

-AdriannaRossi-

martes, 25 de junio de 2013

Crecí.

 Las cosas cambian, siempre cambiarán, y aunque los cambios traen muchas cosas que nos desagradarán, también traerán muchas mejoras, y a eso hay que darle relevancia: a lo bueno, lo que vale la pena.
Así, en un abrir y cerrar de ojos, esta mañana me desperté y me dí cuenta de algo... ya era toda una mujer. ¿Adónde se fueron las colitas con las que solía peinarme mamá?, ya no las usaba más, tenía años de no peinarme así. Ahora mi melena siempre andaba suelta, alborotada, o a penas agarrada con un gancho en la parte más alta de mi cabeza... pero las colitas ya no estaban más.

¿Adónde quedaron esos vestiditos de Disney? cuando vestía de pies a cabeza colores rosados, con llamativos motivos de las princesas más populares de los cuentos, esos cuentos con los que soñaba, esas princesas que anhelaba ser, mis ídolos, mis fantasiosos ideales, ya no estaban más.

¿Adónde quedaron mis muñecas, mis osos de peluche y esa infinidad de juguetes con los que creaba historias en mi habitación? ya no están más... se fueron perdiendo, uno a uno, poco a poco, con el paso de los años. No queda ni uno, para el recuerdo.

Hoy me desperté, después de haber pasado esas horas de sueño viviendo en mi ayer, en mi infancia. Me adentré demasiado en mis recuerdos, volví por una noche a ser la niña, y no la mujer. ¡Era tan real! todo tan exacto, tan detallado... mis recuerdos me ganaron, cobraron vida, demasiado vívidos definitivamente, me la creí. Creí que era de nuevo esa pequeña, traviesa, imparable, soñadora, esa pequeña experta en buscar problemas, esa colochita desdentada, con raspones en sus rodillas, y mugre tras las orejas, que detestaba los vegetales, las tareas y la hora de bañarse y de dormir.

Soñé que mi abuela estaba ahí, lúcida, siempre protectora, pendiente de mi. Que mi tío me hacia morir de la risa, con sus carcajadas y chistes, que sólo él y yo entendíamos. Soñé con mi perrita, una callejera rescatada, llamada "piolina", jamás me amó... siempre me ladraba, buscaba morderme, pero muy en el fondo, nos queríamos.  Soñé con mi madre, llegando tarde a la casa siempre, con su pelo afro natural, negro asabache, y su cara de cansancio, después de cada día. Tantos recuerdos que me han venido a la mente en una sola noche, fue muy fácil confundirme.

Me adentré tanto en el ayer, que ahora al despertar, me sentí como una completa extraña. No reconocía mi habitación, ni mi cama, y al verme en el espejo, me di cuenta que de aquella pequeña niña a penas quedaba reflejo. Mi abuela ya no era aquella señora fuerte y lúcida, ahora vivía en su propia realidad, dejándose vencer por los recuerdos y el alzheimer. Mi tío ya no estaba ahí para jugar conmigo, hace ya bastantes años que había muerto. Y mi mamá, seguía aquí, sólo que ahora con su pelo lacio, color canela, y ya con varios años más encima... la realidad me golpeo de una vez. Yo ya no tenía seis, tenía veinte, pronto veintiuno, y sí, las cosas cambian, es imposible suspendernos en el tiempo, aún más imposible es volver atrás.

Crecí, como todos crecen. La mayoría de los que estaban en mi vida cuando tuve seis años, hoy ya no estaban, por diferentes motivos se habían ido. Las personas siempre solemos tomar distintos caminos... eso pudo haberme entristecido, pero al mirar más allá, me di cuenta de que por todos los que se habían ido, muchos más habían venido, y a ellos sí, los tenía aquí. Buenos amigos, maestros, y amores... un amor, uno verdadero, soñado, como aquellos príncipes de los cuentos que un día leí, que un día soñé, ese no era un sueño, ya era una realidad; Me había convertido en la princesa de un príncipe, y viéndolo así, crecer no había sido tan malo. Mi realidad comenzó a gustarme.

El mundo con los años se pervierte, y nos lleva de encuentro, también termina pervirtiendo a todo aquél que en él habita. Ser un poco pervertido no es tan malo como suena; de hecho es necesario, para no ser pisoteados, para no permitir que se aprovechen de nosotros. No podemos ser eternamente niños, pero siempre debemos procurar guardar un poco de eso en nuestro interior... siempre conservar un poco de esa fe y de esa inocencia que caracterizan a los niños, esa imaginación, y esas ganas de comerse al mundo, esa seguridad de que nada es imposible, eso es lo que debemos guardar, no permitamos que los años y las experiencias nos arrebaten eso.

Crecer esta bien, aunque por ratos nos invada la nostalgia, y seamos presa de nuestros recuerdos. Las cosas cambian, siempre cambiarán, y aunque los cambios traen muchas cosas que nos desagradarán, también traerán muchas mejoras, y a eso hay que darle relevancia: a lo bueno, lo que vale la pena.

Crecí, y sigo creciendo, sigo aprendiendo de la vida, y lo seguiré haciendo, hasta mi último día.

-AdriannaRossi-

Más que una rosa.

La rosa, pese a que tiene sus espinas, no deja de ser cautivadora, sólo aquél dispuesto a soportar unos cuantos pinchazos, y el derramamiento de un poco de su sangre, merecerá ser dueño de toda aquella belleza.
El día de ayer mi novio llegó a mi casa con una rosa entre las manos. Una rosa muy bonita, roja, grande y con sus pétalos bien formados. Era el ejemplo perfecto de una rosa perfecta. La rosa venía envuelta entre listones y papeles con detalles románticos, todo muy lindo, muy delicado.

Desde muchas décadas atrás se acostumbra a que los enamorados regalen rosas a sus chicas, pero ¿por qué?, a las mujeres nos conmueven mucho las rosas, quizá en parte porque nos gusta sentirnos alagadas y apreciadas, nos encantan los detalles,  y asociamos las rosas con romanticismo, de esos amores de antaño, donde todo se resumía en tomar de la mano a tu enamorada, no se andaba pensando en sexo, ni lujuria, en ninguna de las perversiones que con el tiempo, han venido a opacar la verdadera belleza y significado del amor. Cuando nos regalan una rosa, nos sentimos como Julietas, siendo alabadas por su Romeo. 

¿Han escuchado la expresión de "a la mujer no se le toca ni con el pétalo de una rosa"? , ¿por qué no con una pluma? ¿o con el roce suave de los dedos?, ¿con un trozo de seda? o cosas que por su textura, son igual de inofensivas... ¿por qué?

Pues desvariando en mi incomprendida y bipolar mente, saqué algunas conclusiones propias:

La rosa es hermosa, en todo el sentido de la palabra. Es una expresión de belleza completamente natural. La rosa es delicada, al tener una entre tus manos instintivamente la tratas con sumo cuidado, la acaricias, aspiras su aroma suavemente, y con sumo cuidado deslizas tus dedos sobre sus pétalos, te transmitirá una suavidad y delicadeza tan profundas, que hasta cierto punto, instintivamente buscas protegerla. La rosa, pese a que tiene sus espinas, no deja de ser cautivadora, sólo aquél dispuesto a soportar unos cuantos pinchazos, y el derramamiento de un poco de su sangre, merecerá ser dueño de toda aquella belleza.

Creo que las mujeres en muchos aspectos somos como las rosas, delicadas, y bellas por naturaleza, sabemos entregar la belleza que nos caracteriza únicamente a aquél que nos merezca, aquél dispuesto a soportar nuestras espinas, y con amor y dedicación quitarlas, una por una. Las mujeres al igual que las rosas, solemos ser tan delicadas, que llegamos a ser muy indefensas, necesitamos que nos cuiden, que nos protejan, que nos consientan.  Necesitamos sentirnos valoradas, ser acariciadas, pero con ternura. 

Las mujeres no buscamos un usurpador, que llegue a nuestro jardín, nos arranque sin cuidado ni consideración, y después nos deje tiradas a nuestra suerte, esperando a que nos marchitemos. Las mujeres buscamos a un jardinero, que nos vea crecer, abrirnos al mundo, en nuestro máximo esplendor. Un jardinero que día con día nos cuide, nos riegue, nos abone, y nos ame... un jardinero que nos ame con dedicación, que se entregue por completo a la tarea de cuidarnos, que aleje toda plaga y daño de nosotras.  Un jardinero que tenga las manos marcadas de heridas, víctimas de nuestras espinas, pero que cada herida refleje su amor hacia nosotras.

Una rosa y una mujer son más parecidas de lo que muchas veces pensamos. Quizá después de todo, a las mujeres nos gusta que nos regalen rosas, simple y sencillamente porque nos sentimos identificadas con ellas.

Que no se pierda la bonita costumbre de regalar rosas entre enamorados.


-AdriannaRossi-

domingo, 23 de junio de 2013

Necesito que me amen.

Necesito sentir y que me sientan, necesito dejarme llevar por mis deseos, que el erotismo me invada de vez en cuando. Necesito saber que es amor, no sólo sexo. 

Necesito que me amen, ¿qué tiene de malo admitirlo? , no siento que mendigo amor, no caigo en lo patético, simple y sencillamente soy honesta, soy valiente, me atrevo a decir lo que muchos callan.

Soy humana, y necesito amor, es mi naturaleza buscarlo. Los reptiles buscan calor, para calentar el frío inmenso que llevan por dentro, ellos se entregan al sol, sin importar nada, ellos lo buscan, porque lo necesitan, ellos no temen, no niegan sus necesidades... sólo se entregan, se dejan acariciar por cada rayo que puedan captar, y se sienten bien, se sienten muy bien.

¿Por qué yo no puedo entregarme al amor? ¿por qué no lo puedo buscar?, no soy pecadora, sólo lo acepto,  acepto lo que todos sabemos, acepto que necesitamos amor. 

Necesito que me amen, que me valoren, que me cuiden. Necesito caricias, besos, y el calor de otro cuerpo desnudo contraminándose contra mi pecho. Necesito sentir y que me sientan, necesito dejarme llevar por mis deseos, que el erotismo me invada de vez en cuando. Necesito saber que es amor, no sólo sexo. 

Necesito soñar, creer nuevamente en cuentos de hadas, recuperar un poco de esa inocencia ya tan perdida, tan olvidada, tan menospreciada; Esa inocencia que saque de mi vida a la fuerza, ya que muchos dijeron que ella me haría víctima de muchas traiciones y abusos, de muchos dolores que más valía evitar, eso dijeron y yo les creí. Aprendí del mundo a endurar mi corazón, a enfriar mis sentimientos, aceptando la soledad, y el frío de su abrazo. Me resigné a eso, me dejé influenciar... negué mis sentimientos y mis deseos, me convertí en una más, una subordinada, un robot, me convertí en lo que los demás esperaban, dejé de buscar lo que necesitaba, dejé de creer en el amor.

Pero el amor es necesario, sumamente necesario... no, no el amor de amistades, ni el amor de familia, sino ese amor que es capaz de fundirse entre besos y caricias, ese amor que te hace perder la cabeza, ese amor que te hace sufrir, pero con un sufrimiento que te hace sentir vivo, que te demuestra que en efecto, estás enamorado.

Necesito que me amen, y no me da vergüenza decirlo. Vergüenza es refrenar nuestros instintos, nuestros deseos, nuestra naturaleza; No podemos negar lo que somos, no para siempre. Quién intente hacerlo sólo logra caer en lo patético, condenarse a la infelicidad. ¡Yo no quiero ser infeliz! quiero sentirme completa, quiero dejarme llevar, quiero arriesgarme a la vida, quiero entregarme al amor, que el amor me haga suya, que al amor me penetre, que viva en mi, que se adentre en mis entrañas, que no se arranque de mi pecho, que crezca conmigo.

Quiero que el amor me robe los suspiros, y que con sus besos me deje sin aliento, que se enrede en mis cabellos, que me susurre al oído, que se deslice por mi piel, y sin frenar me eleve al cielo... quiero que me acaricie en las noches, que me abrace si hay frío, que llore conmigo, que me haga llorar. Quiero al amor, con sus pros y sus contras, con lo bueno y lo malo, así lo quiero aceptar. Estoy dispuesta, aunque sé que hay riesgos, ya me lo advirtieron, y sobre aviso no hay reclamo... pero no me importa, porque yo aún creo, yo aún quiero, lo quiero de verdad.

Necesito que me amen, así de simple, así de claro, así de real... todos lo necesitamos, todos lo deseamos, pero muchos no nos atrevemos a decirlo, muchos lo ocultamos, pretendemos volvernos fríos, puritanos, pretendemos no tener sentimientos, no tener deseos, no ser carne, nos mentimos a nosotros mismos, creemos que nadie lo sabe, que hemos engañado al mundo, más en esas noches en donde ya no podemos más, nos desahogamos, sin mayor amante que nosotros mismos, y después viene la culpa, la maldita culpa que nos invade, la soledad, la tristeza y la depresión. Es ahí cuando nos damos cuenta,  somos humanos, necesitamos ser amados, necesitamos que nos den amor, que nos den calor, que nos den placer, necesitamos lo que todo ser humano necesita, y eso está bien, eso es natural, es nuestra naturaleza, así es.

Necesito que me amen, necesito del amor.

-AdriannaRossi-



Soy tu pensamiento.

En la intimidad siempre yo te encuentro, no debes llamarme, yo vivo aquí adentro. Búscame en tus sueños, bajo de tu almohada, búscame en los cielos, en cada mirada.
Quiero ser tu pensamiento, ese que vive contigo, ese que respiras, que bebes, que comes y sientes... quiero ser el pensamiento que te saque las sonrisas, que te robe los suspiros, que te deje sin aliento.

Quiero ser tu pensamiento, abarcar toda tu mente, entregarme por completo, y jamás estar ausente. Pensamiento fuerte y claro, como amores de verano, que parecen tan soñados, increíbles, no mundanos.

Quiero el roce de tus labios en la calma de la noche, quiero el calor de tus manos que se enreda en mis cabellos, quiero que me pienses día y noche, quiero que me sueñes sin reproches, quiero que me grites que me amas, que me necesitas y me clamas.

Quiero que lo grites en susurros, que eres sentimiento nada impuro. Quiero que lo admitas, no lo calles, que en sueños me busques y me halles.  Hazme ahora el amor, que no exista el sexo, hazme tuya hoy entre puros besos. Soy tu pensamiento, tu deseo íntimo, soy tus fantasías, tu sueño inconcluso... 

Rozame los labios con tu tacto frío,  piénsame en silencio, no busques los gritos. En la intimidad siempre yo te encuentro, no debes llamarme, yo vivo aquí adentro. Búscame en tus sueños, bajo de tu almohada, búscame en los cielos, en cada mirada. Búscame en la lluvia, luces de la luna, en cantar de aves, en suspiros de almas.

Vuela ahora conmigo, soy tu pensamiento, soy lo que tu sueñas a cada momento. Llego adónde digas, no tengo barreras, me elevo tan alto como tú lo quieras. No existe imposible para aquél que ama, me adentre en tu pecho, hasta tus entrañas.

Ya nadie me arranca, ya tú no me olvidas, es que tú me amas  como no has sabido. Así es el amor, vive en pensamientos, día y noche está, en cada momento. El amor se vive, el amor se abraza, el amor se aferra, nadie lo desplaza.

Soy tu pensamiento, eso es bien sabido, vivo yo contigo, vives tú conmigo. No existen finales para aquél que ama, despertamos juntos todas las mañanas.

-AdriannaRossi-

sábado, 22 de junio de 2013

Malos días, definitivamente.

Estoy aquí, postrada en cama, pidiendo a Dios porque las cosas no empeoren, sólo quiero sentirme sana, de una vez por todas.

No sé si será mal de ojo, pero de unos días para acá, sólo me la paso enferma. Y este ha sido uno de mis peores días. Me levanté en la mañana, con unas terribles ganas de vomitar y un dolor de estómago insoportable... irónicamente ya estando en el baño, mis ganas de vomitar desaparecían, así que deje de hacerle caso a mis impulsos; Lo que no desaparecía para nada era el dolor de estómago, que me doblaba, literalmente.

Ayer llegué a la clínica con una fiebre y mocosera que a nadie se la deseo, y no aguantaba la garganta. La doctora me dio tres pastillas: antibiótico, antialérgico y acetaminofén; Me las tomé rápido, las tres juntas, pero no hicieron gran efecto, ya que llegue hasta altas horas de la madrugada quejándome del dolor de cabeza y el malestar general que le da a uno cuando anda enfermo.

Al parecer mis cólicos de esta mañana se debía a que me tomé esas tres pastillas sin tener mucho en el estómago, y los antibióticos si que son destructores, mi flora intestinal estaba totalmente consumida por los ácidos... esa era la explicación. 

Me dieron una cápsula para regenerar la flora intestinal en la clínica, al verme verdaderamente afectada; Yo ya ni quería pensar en pastillas, pero la doctora me aseguró que esa me haría más bien que mal, así que cedí. De regreso a casa, en plena autopista comencé a sentir unas naúseas incontrolables, sabía que pasaría, era inevitable... le grité a mi mamá que parara, que me dejara bajar del carro porque iba a vomitar, pero como ya se imaginarán, un sábado por la mañana en una autopista difícilmente se puede parar de la nada. Abrí la ventana, saqué la cabeza y las arcadas me ganaron, vomité lo único que tenía en el estómago, un miserable pan, aunque en esos momentos habría preferido no tener ni eso. Debo de admitir que después del desagradable vómito, se siente un alivio inmenso; Tu cuerpo ya ha sacado lo malo, y mágicamente ya te sientes bien. 

Creí que ya todo había acabado, pero llegando justo a casa, volví a sentir esos cólicos que me impedían mantenerme en píe. Ya no había nada qué vomitar, así que sólo subí a mi pieza y me quede dormida. No dormí mucho, quizá menos de una hora, pero el calor del mediodía me despertó. 

Cuando bajé, me ofrecieron comida, chuleta de cerdo. Definitivamente no era recomendable que comiera algo tan grasoso con el estómago tan delicado, pero pudo más mi hambre que mi razón, y después de hacer el intento de tragar unos cuantos bocados de comida, comencé a sentirme mejor.

Todo iba bien... hasta este preciso momento. No tengo más cólicos, pero comienzo a sentir esos desagradables escalofríos, la vista irritada y la cabeza que me da vueltas, esos síntomas que te indican que viene la peor parte.

¿Lo más irónico de todo?, pues que estoy de vacaciones. Debería de estarme diviertiéndo, descansando a mis anchas, o de salida con mis amigos y mi novio... pero no; Estoy aquí, postrada en cama, pidiéndo a Dios porque las cosas no empeoren, sólo quiero sentirme sana, de una vez por todas.

-AdriannaRossi-

Las vueltas que da la vida.

La vida da vueltas sumamente inesperadas, las cosas cambian y los roles se invierten.

Soy de esas chicas que no suelen olvidar fácilmente, y no me refiero a ser rencorosa, simple y sencillamente tengo muy buena memoria (aunque no para los estudios, jajaja), suelo recordar muy bien nombres y rostros de compañeros de básica, personas con las que quizá no he interactuado mucho, pero sin embargo, sus caras y sus nombres no se me borran. Tengo la quizá mala costumbre de ponerme a buscar a esos compañeros en el facebook, simple y sencillamente porque soy curiosa, y quiero saber qué ha sido de ellos.

El otro día, después de haber tenido que cerrar mi cuenta y abrir otra (es una larga historia), me salió entre las sugerencias de amistad el perfil de una muchacha que había sido mi compañera allá por el sexto o séptimo grado, la agregué.

Horas después ella me aceptó, y me mando un mensaje privado, preguntándome quién era yo... lógico, no me recordaba. Debo de admitir que en el colegio (por lo menos hasta el noveno grado) no solía llamar mucho la atención, era una niñita tímida, y muy poco agraciada, con piernas de pollo, cabello demasiado corto para ser de una niña,  y como si no fuera suficiente, un natural y extravagante  "afro", y claro,  mis gafas, con correa al cuello "para que no las perdiera", decía mi mamá.

En fin, ya se imaginarán que popularidad no era mi segundo  nombre. Volviendo a la historia... intenté recordárle a esta chica sobre mi existencia, le expliqué de qué colegio y grado la recordaba, pero ella apenada, simple y sencillamente admitió que no tenía ni idea de mi. 

-Sube fotos, para ver si al verte me recuerdo- me dijo. Y es que como ya lo había mencionado, tuve que abrir nueva cuenta en facebook, y aún no había tenido tiempo de subir fotografías. Acepté, y comencé a recuperar mis álbumes de fotos de mi anterior perfil, subí unas cuantas, y después de un buen rato la chica me volvió a escribir.

-¡Ya, ya te recuerdo! vaya que has cambiado demasiado.

Sí, en efecto había cambiado... ahora tengo un cabello demasiado largo para mi gusto, sigue teniendo sus aires de afro, pero la plancha y los tratamientos han logrado domarlo. Ya no tengo piernitas de pollo, ¡para nada!, mis cuatro años en danza me ayudaron a desarrollar un muy buen paquete (o por lo menos esa mentira me ha metido mi novio) jajaja; y sí, sigo dependiendo de mis gafas, pero ahora uso unas con muy buen estilo, y no aquellas que parecían sacadas del armario de mi abuela.

- ¡Tú eras la niña a la que yo molestaba mucho, y trataba mal!, lo siento.

Fue quizá mecanismo de defensa mío, pero con los años había olvidado ciertos maltratos que había sufrido en el colegio... aunque tenía presentes muchos, pero la parecer no todos. Debido a mi aspecto y timidez fui víctima de muchos rechazos y maltratos durante mi vida académica. Me escondían la mochila, y tiraban mis útiles al basurero, me golpeaban, me ahorcaban contraminándome contra la pared, e incluso una ocasión me dejaron encerrada en el baño durante toda una tarde, no son gratos recuerdos, pero así fueron las cosas.

Aunque debía admitir que no recordaba que esta chica en específico me hubiese hecho algún daño; Hasta que ella me refrescó la memoria. Hasta cierto punto sentí un poco de placer... no es que sea una modelo, ni nada por el estilo, pero mi desarrollo me ha ayudado a convertirme en una muchacha atractiva, no despampanante , pero sí atractiva. Además, soy una estudiante universitaria sobresaliente, tengo un guapísimo novio que será un futuro ingeniero en sistemas y que me trata como a una verdadera princesa día con día, un carro recién comprado..., y en fin, me va bien en la vida, tengo todo y hasta más de lo que cualquiera podría vivir.

No es que a ella le vaya mal, para nada. Pero estoy segura de que las cosas no le han salido como quería. Ha engordado bastante, quizá más de lo necesario, tiene una hija (que es una bendición, pero quizá le llegó antes de tiempo), y no ha continuado con sus estudios universitarios. Ante estas realidades, me sentí afortunada y bendecida... me sentí como el patito feo, que después ante el asombro de quienes lo molestaban, se convirtió en un bello y admirable cisne.

No es la primera vez que me pasa, ya en anteriores ocasiones me he encontrado a compañeras que en debido momento me hicieron daño, y ahora al verme, puedo notar que incluso se avergüenzan de lo que me hicieron,  de cómo he cambiado yo, y de cómo se han estancado ellas.

En lo personal pienso que todos aquellos abusos, maltratos y rechazos de los que fui víctima ayer, son los que me ayudaron a convertirme en lo que soy, una persona inteligente, que no se deja inmutar por las opiniones ajenas a su vida, una persona justa, pero selectiva, que sabe hacía dónde va, que tiene muy clara su meta. Ustedes dirán que a penas era una niña, y que lo que me pasó de niña no puede influir tanto en lo que soy... pues se equivocan. La niñez es la más frágil etapa de la vida de los seres humanos, etapa en la que somos masilla suave, esperando a ser esculpida.

La vida da vueltas sumamente inesperadas, las cosas cambian y los roles se invierten, por eso creo que debemos de andarnos con cuidado, no marginar ni discriminar a nadie, nunca se sabe qué será de esa persona el día de mañana; Quizá y sólo quizá, necesitemos de ella, que nos tienda la mano, que nos dé una oportunidad, así que más nos vale respetar a todo aquél que se cruce en nuestro camino, no creernos más ni menos que nadie, practicar la igualdad en nuestro diario vivir.

-AdriannaRossi-



viernes, 21 de junio de 2013

¿Más que amigos? no, gracias.

No es que algo esté mal con nosotros, no es que estemos "defectuosos", no es que seamos feos o raros, simple y sencillamente esa no es la persona que la vida nos tiene destinada, y hay que aceptarlo, aunque duela.
 
Últimamente se le está dando mucho auge a una situación que siempre ha estado ahí, latente, víctimizando y torturando a muchos, rompiendo corazones y sueños, manteniéndolos presos de sus deseos y su fe en lo que podría ser... hablo de la famosa "friendzone."

Y es que podríamos definir friendzone como la situación que se presenta cuando en una pareja de "amigos", uno de los dos siente más que amistad por el otro, quiere más que amistad, pero el otro simple y sencillamente no le corresponde, para el otro nunca habrá más que amistad entre ambos.

¡Vaya tortura! viene siendo algo así como un amor no correspondido, y eso si que duele. A mi me pasó una vez, terminé enamorándome de mi mejor amigo... lo curioso es que en este caso no fui yo la víctima de la friendzone, sino él. Durante años me amó en silencio, sin atreverse a confesar sus sentimientos, porque yo siempre le deje entrever que él era mi amigo, y que lo amaba, pero no de la manera en la que se aman las parejas, sino de la manera en la que se aman los mejores amigos, y no más. Para mi mala suerte, me di cuenta de que su amor era correspondido, pero ya era demasiado tarde, por cuestiones de la vida lo nuestro no pudo ser. En fin...

¿Qué hacer entonces? ¿qué hago si me gusta mi mejor amigo/a?, pues una de dos... ser pacientes y esperar, quizá tarde o temprano el otro se de cuenta de que también siente algo por nosotros (como fue mi caso), pero cabe aclarar que no es un caso muy común. La otra opción es de plano, resignarnos, aceptar que esa persona no es para nosotros, y que entre ella y nosotros jamás existirá más que una muy hermosa amistad. A veces es mejor eso, conservar y cuidar la amistad, y no correr el riesgo de perderla, todo por una inocente fantasía.

Debemos tener muy claro algo: primero está el amor hacia nosotros mismos, después viene eso de amar a otros. Entonces, no podemos estar ahí, mendigando migajas de amor a quién no nos quiere amar, eso es caer en lo patético, es humillarnos por completo, es no valorarnos a nosotros mismos, no valorar nuestros sentimientos, regalar nuestro corazón sin importar que tan bien recibido sea.

Si alguien nos amará, será porque así lo quiere, y nos amará por completo, no un poquito, no a medias, no bastante... sino por completo. De eso se trata el amor, entrega total y completa.

No podemos obligar a nadie a que nos ame, aunque lo admito, en algunos casos sería genial, pero simple y sencillamente no se puede, y aunque se pudiera, no sería correcto, no sería real. No convirtamos el amor en un capricho, no nos obsesionemos con lo imposible, seamos maduros, aceptemos que cuando algo no se puede, no se puede y punto.

No es que algo esté mal con nosotros, no es que estemos "defectuosos", no es que seamos feos o raros, simple y sencillamente esa no es la persona que la vida nos tiene destinada, y hay que aceptarlo, aunque duela. Es cierto que antes que novios, es necesario ser mejores amigos, eso pasa seguido, que los mejores amigos terminen enamorándose... pero si ya lo intentamos una, otra y otra vez, y siempre nos siguen rechazando, entonces no insistamos. Lo único que lograremos será volvernos molestos, parecer desesperados, detonar el poco amor que sentimos por nosotros mismos. 
El amor no se crea a la fuerza, no se da por generación espontánea, no se elige, no se exije.

Es difícil, es crudo, pero es verdad y realidad.

-AdriannaRossi-

¡Un año compartiendo palabras!

Sólo me queda decirles ¡Gracias!... por acogerme en su comunidad, por brindarme diariamente un poquito de su tiempo, leyendo cada desvarío que escribo.

Así es, un día como hoy (21 de junio), exactamente hace un año estaba escribiendo la entrada que daría inicio a esta gran aventura, que daría vida a este espacio, dedicado a palabras, pensamientos, emociones, miedos, sueños y todo eso que no se ve, que no se toca... lo que únicamente se siente, nuestra esencia humana.

Este día mi blog llega a su primer aniversario, un año en el cual me he enamorado todavía más del arte poderosa y mágica de las palabras, me he enamorado de mi y de mis talentos, he aprendido a plasmar lo que siento, lo que me pasa, de manera artística. He logrado que otros se motiven, se inspiren y se identifiquen con lo que escribo, he logrado llegar a los corazones y almas de muchos, he logrado que otros hagan suyas mis palabras, y eso sinceramente no tiene precio.

En este poco tiempo que tengo en Blogger he conocido a otros artistas, de los cuales he aprendido mucho, los cuales me han permitido adentrarme en sus vidas, a través de lo que escriben, y aunque kilómetros de distancia nos separen, cuando los leo siento que vivo sus vidas, los siento demasiado cercanos a mi. Quisiera tomarme el tiempo de mencionarlos, pero nunca terminaría, probablemente olvidaría a muchos, así que no lo haré, pero ustedes mejor que nadie saben lo mucho que los aprecio, y es que pese a la distancia, se han convertido en mis verdaderos amigos; Ustedes saben más sobre mi vida que las personas que físicamente me rodean, y a veces pienso que de hecho a ustedes les importo más que a muchos que se hacen llamar mis amigos. Ustedes me han aconsejado cuando simple y sencillamente ya no puedo más, cuando me enredo con mis problemas y me agobian mis confusiones, sus comentarios siempre directos y acertados me han hecho razonar y volver a la realidad, me han servido de apoyo, me han motivado y ayudado a levantarme.

Sólo me queda decirles ¡Gracias!... por acogerme en su comunidad, por brindarme diariamente un poquito de su tiempo, leyendo cada desvarío que escribo, por formar parte de mi vida, aunque sea a través de un monitor, pero lo hacen.

Espero que este sea el primero de muchos años, espero tener la vida y la inspiración de escribir mucho más... que de mi alma se desborden las palabras, desgastar las teclas de mi ordenador, no importa, yo sólo quiero escribir, y compartir mi vida y mis palabras con ustedes; Como ya lo he dicho anteriormente, mis palabras son mi arte, y este blog es mi legado, mi esencia, yo.

Les dejo el link de la primera entrada que vio nacer este humilde, sencillo, pero sincero blog: http://adriannarossi.blogspot.com/2012_06_01_archive.html , la leo y siento que realmente no han pasado más de un par de días desde que escribí eso... pero el tiempo vuela, de verdad que sí.

Dentro de poco estaré escribiéndo sobre mi graduación, sobre mi boda, sobre el nacimiento de mis hijos... ¡Tantas cosas por  vivir, y tanto por escribir! ¡que emoción! jajaja.

Un abrazo a todos ustedes, los aprecio mucho, de corazón.

¡Gracias! 

-AdriannaRossi-

jueves, 20 de junio de 2013

La respuesta a cada cosa que pedí...


- ¿Sabes lo hermoso y perfecto que eres?
- ¿Hermoso y perfecto? pero si soy un espanto.
- ¿Quién lo dice?
- Mi espejo, cada mañana.
- Tu espejo es frígido, sin vida, inerte... tu espejo es incapaz de ver lo que yo puedo ver.
- ¿Y qué es lo que ves?
- A ti.
- ¿Y quién soy yo?
- La respuesta a cada cosa que pedí en mi vida.
¿Qué pediste?

A los cinco años pedí un muñeco al cuál cuidar, al cuál pudiera abrazar por las noches, al cuál pudiera consentir. A los siete años pedí a un papá, uno que me cuidara, que me amara, que me protegiera y buscara lo mejor para mi, como veía que lo hacían los padres de las otras niñas. A los diez años pedí un amigo, igual de maravilloso que mis amigos imaginarios, pero que fuera real, un amigo que me comprendiera, que no me juzgara, que me aceptara tal como soy. A los catorce  años pedí un novio guapo, que me convirtiera en la envidia de todas mis amigas, que me sedujera con una sola mirada, que me robara el aliento en un beso, y me sacara suspiros con su voz. A los dieciséis años pedí una cura para mis problemas y depresiones, algo que me quitara el dolor, que curara mi enfermedad.  A los dieciocho años pedí un amor, uno verdadero, alguien en quién sentirme apoyada... espere todo una vida, pero de golpe se me cumplieron todos mis deseos, todas mis respuestas venían enfrascadas en una sóla persona, tú.

Te amo.

-AdriananRossi-

Confesiones de un corazón agradecido.

Fueron más grandes las ganas de amar, y la fe de creer que podíamos ser amados, sólo lo hicimos.

Vivo un sueño, un verdadero sueño. No deja de sorprenderme lo maravilloso que es tu amor, lo maravilloso que es lo nuestro. Es increíble la capacidad que tiene esto de crecer... he llegado a pensar que en definitiva, no tiene límites. Nuestro amor no mengua, pese a que no ha sido utópico ni perfecto.  ¿Cómo es posible? después de tantas peleas, de tantos arranques de cólera en los que he dicho cosas que no siento, después de tanto que te he lastimado, después de muchas lágrimas derramadas, ¿cómo es posible que no mengue ni siquiera un cachito? no lo entiendo, es sobrenatural.

Cada día que despierto, despierto feliz, despierto tranquila, despierto motivada, con ganas de comerme al mundo, con ganas de superarme, con ganas de ser mejor... mejor para ti, mejor para nosotros, mejor para nuestro futuro, para nuestros hijos.  Cada día nuevo que llega, es una nueva oportunidad para amarte, más y mejor que ayer, estoy tan agradecida con la vida y con Dios por brindarme ese privilegio; El privilegio de amarte, sin duda la bendición más grande, la oportunidad más maravillosa que se me pudo brindar.

Amarte es algo divino, fuera de este mundo, fuera de mi propia comprensión... sólo sé que te amo, pero no logro comprender el alcance verdadero, todo lo que involucra esto que siento; Sólo me dejo llevar por mis instintos, mi instinto de amarte, de cuidarte y protegerte, mi instinto de hacerte feliz, de darlo todo por ti, de ser lo mejor para ti, ese instinto natural de amar, que todos traemos dentro, pero que sólo la persona destinada, sólo el amor verdadero puede despertar.

Maduro, crezco a tu lado, de tu mano; Voy dejando atrás a la niña que era cuando me conociste, cuando llegaste a mi vida, voy dejando atrás los caprichos, las peleas absurdas, las inseguridades y la pereza, voy dejando atrás esa rebeldía que no me llevaba a nada bueno... me voy convirtiendo en la mujer que anhelé ser, la mujer para ti, la que Dios te guardó y destinó, y estoy sumamente orgullosa de eso, orgullosa de la persona en la que me estoy convirtiendo, todo gracias a ti, gracias a tu amor.

Nos entregamos mutuamente, sin saberlo, sólo nos dejamos llevar, nos arriesgamos; Creímos en una fantasía, en un juego, en un cuento que parecía ser demasiado bueno para ser real... fuimos curiosos, y aunque sabíamos que podíamos salir lastimados, no nos importó, fueron más grandes las ganas de amar, y la fe de creer que podíamos ser amados, sólo lo hicimos, saltamos de la cumbre sin ningún paracaídas, y encontramos refugio en los brazos del otro. No me arrepiento de nada, jamás me arrepentiré... 

Fuiste, eres y siempre serás lo mejor que me pudo haber pasado en la vida.

-AdriannaRossi-

miércoles, 19 de junio de 2013

"Liebster award", mi primer premio.

Descarga el premio en mi cuenta de Twitter https://twitter.com/AdriannaRossi

Bueno, lo prometido es deuda. El día de hoy recibí mi primer premio como blog (sinceramente aún no entiendo muy bien cómo funciona esto, o cuál es el objetivo), pero estoy feliz, supongo. 

Agradezco públicamente a http://estashojasenblanco.blogspot.com/ por tomarme en cuenta y nominarme a este premio.

También me dejaron una tarea... contestar once preguntas, y formular once más, para los blogs que yo decida nominar. Muy bien, empiezo contestando las preguntas que me hicieron:

¿Qué es lo que más anhelas en la vida?

Anhelo muchas cosas, me considero una persona sumamente ambiciosa (de la buena manera, claro está), pero creo que todas esas cosas que anhelo van enfocadas a un mismo objetivo: realizarme en la vida... llegar a ser una mujer completa, tanto en el ámbito profesional, como familiar y personal. Simple y sencillamente trabajo por eso, para ser mejor cada día, y tomar las desiciones correctas, que me encaminen y acerquen más a esa meta.

Un objeto que te traiga muchos recuerdos.

Creo que mi anillo "de compromiso al compromiso"; con mi novio compramos un par de anillos, simbolizando nuestro amor y nuestra unión... anillos que significaban que ya estabamos unidos para siempre, pero no comprometidos (aunque ambos sabemos que sí) pero siempre espero mi sortija y la petición oficial de matrimonio, jajaja. En fin, desde que compramos esos anillos, ni él ni yo nos los quitamos... me siento hasta desnuda cuando tengo que quitármelo para bañarme o lavar algo. Mi anillo me trae muchos recuerdos, recuerdos bonitos, recuerdos con él, la persona a quién más amo, quién me hace feliz.

Un amigo y/o familiar a quien más estimes.

Mi mamá, indudablemente. Mi madre es una mujer muy exitosa y respetada... muchos la conocen como una mujer realizada, pero no conocen su verdadera historia, yo sí. Mi mamá fue madre y padre para mi, me saco adelante teniendo practicamente nada, sin ningún apoyo ni ayuda, luchó por mi, cuando nadie creyó en ella, ella se rebuscó, tocó infinidad de puertas, y aprovecho al máximo las pequeñas oportunidades que le daban... ahora en día, después de no tener nada, mi mamá lo tiene todo, a base de esfuerzo y trabajo, y eso me enorgullece como no tienen idea. Espero algún día llegar a ser aunque sea una mínima parte de lo que es ella.

¿Cómo tratarías de solucionar la pobreza en el mundo?

Sinceramente eso es algo demasiado utópico, creo que nada de lo que yo haga podría aportar una mínima parte de lo verdaderamente necesario para lograr solucionar la pobreza. Pero educar a las personas sería un buen comienzo... no en matemáticas, ni ciencias, ni nada de lo que se da en los colegios y universidades, sino una educación moral y espiritual, que enseñe a las personas a valorar, que enseñe sobre justicia e igualdad, eso sería sumamente necesario.

¿Crees que "todas las personas somos iguales"?

No, lógicamente no somos iguales, estoy segura de que no existe ninguna otra Adrianna Rossi en el mundo exactamente igual a mi... somos seres únicos e irrepetibles, eso en el sentido literal. En cuanto a igualdad social y mental, no somos iguales, porque tristemente no todos tenemos las mismas oportunidades, no todos tenemos los mismos recursos. Siempre habrán personas que estén mejor y peor que nosotros, esa es la realidad, pero nunca será lo ideal.

¿Cuál es la principal razón por la que te creaste tu blog?

Me gusta escribir, ¡me encanta escribir!... solía escribir grandes estados en facebook, y tweets muy motivadores y populares en twitter, pero eso ya no me alcanzó, necesitaba escribir más, sin límites, dejarme llevar sin preocuparme por llegar al máximo de carácteres permitidos. Por eso cree este blog.

¿Por quién darías tu vida?

Por mi novio, aunque suene superficial... difícilmente personas ajenas a nosotros dos serán capaces de comprender el grado de compromiso emocional y espiritual que tenemos. Una relación demasiado especial, sinceramente. Daría mi vida por él, porque si él me llegara a faltar, simple y sencillamente mi vida habría perdido su motivación y motor principal, las cosas ya no tendrían sentido.

¿Qué comportamientos cambiarías en los hombres?

La tonta e infantil obsesión que tienen con el fútbol... ¿qué tiene de divertido ver a un montón de caballeros sudados y sucios corriendo tras un balón? me parece absurdo. También pondría algún freno, alarma, o algo que evitara que los hombres pudieran maltratar a una mujer... repudio eso.

¿Es necesario que una mujer se acicale, maquille tanto para salir a algún lugar?

Eso es cuestión de cada quién. Si a la mujer le gusta hacerlo y se siente bien, que lo haga. Si prefiere salir despeinada y en pijama, también. En lo personal, no me siento bien si salgo y no me arreglo, pero tampoco me esmero demasiado en arreglarme, ningún exceso es bueno.

Si fueras un objeto, ¿cuál serías?

Esta es quizá la más difícil de todas... probablemente sería algún buen libro. Los buenos libros nunca mueren ni quedan en el olvido, pasan de mano en mano, culturizando, educando, inspirando y entreteniendo a quién los lee.

Si yo te concediera un deseo, ¿qué pedirías?

Sinceramente no creo que pudieras concederme algo que yo no tenga ya... no eres Dios, y sólo él es capaz de concender lo que mi corazón verdaderamente anhela.

Ahora vienen mis nominados:



Estos ocho blogs son para mi en lo personal, de los mejores que he podido leer, por eso les entrego este premio. Ahora bien, recibir este premio lleva consigo unas cuantas responsabilidades: 

- Nombrar y agradecer el premio al blog que te lo concedió.
- Responder a las 11 preguntas que te formule.
- Enumerar 11 cosas sobre ti.
- Formular 11 preguntas para que respondan los bloggers a los que 
  concedes el premio.
- Visitar los blogs que han sido premiados junto con el tuyo.
- Informar a los blogs de su premio.


Las preguntas que mis nominados tienen que responder son:

- ¿Qué piensas del amor? dejanos entrever tu perspectiva
-¿Tienes o has tenido una mascota? cuéntanos sobre ella.
-¿Cuál es el mejor libro que has leído? ¿por qué?
-¿Una frase o mantra que te ayude e inspire mucho?
-¿Cómo definirías tu blog?
-Menciona un tema sobre el cuál jamás escribirías en tu blog, y por qué.
- ¿Cuál es tu mayor aspiración en la vida?
-¿Crees en la vida después de la muerte? ¿qué piensas de eso?
- ¿Tu mayor miedo?
- ¿Tu peor defecto?
- ¿Tu mayor virtud?

Bueno, he cumplido con lo encomendado, espero ustedes hagan lo mismo. 
¡Un enorme abrazo!

-AdriannaRossi-