Tenemos la capacidad de sobresalir, TODOS la tenemos. La diferencia está en las ganas, en el verdadero deseo de llegar lejos, de ser el mejor.
Hay momentos en la vida, en que por mucho que lo intentemos, pareciera que no salimos del hoyo en que hemos caído. Momentos en los que las heridas son tan profundas, y la sangre que ya hemos derramada es tanta, que simple y sencillamente nos desvanecemos, y sentimos morir. Hay momentos en los que perdemos la fe en nosotros mismos, en nuestras capacidades, en nuestro poder de triunfar. Momentos en los que ya no hay nada en qué creer, nada por qué luchar... Hay momentos de momentos.
No, esta no es otra de esas entradas en las que escribiré sobre la poca esperanza que queda en el mundo, o sobre la inmensa decepción que inspira nuestra humanidad. Tampoco escribiré sobre verdades dolorosas, ni sobre penas y miedos que no dejan avanzar.
Hoy escribiré sobre la esperanza, y las ganas de salir adelante y conquistar cada sueño y meta trazada; Sobre el verdadero y natural deseo de sobresalir, de ser el mejor, de ser reconocido... esas ganas de enorgullecerse de lo que se logra, esas ganas de venir desde abajo, y llegar hasta lo más alto de la cima, hasta donde nunca nadie creyó que podríamos llegar.
La gente suele burlarse de los demás al escucharlos hablar sobre sus sueños y aspiraciones. A las personas que sueñan alto, y en grande, se les tacha de fantasiosos... personas que imaginan utopías, personas que jamás pasarán de eso, imaginar.
Pero, ¿por qué?, ¿cuál es el deseo y la necesidad de hacer daño? ¿por qué las personas se empeñan tanto en destrozar y cortar las alas de los sueños de otros? ¿qué ganan con eso?... Pensando y repensando, llegué a la conclusión de que esas son personas egolatramente bulímicas. Al igual que una persona con este transtorno alimenticio, que busca llenar vacíos emocionales e inseguridades a base de pura comida, así mismo estas personas egolatramente bulímicas, inseguras, cobardes y frustradas, buscan sentirse superiores, haciendo sentir inferiores a los demás, buscando a través de las palabras y comentarios hirientes, evitar que estos desplieguen sus alas, y aprendan a volar... cosa que ellas nunca lograron.
En esta vida rarísima vez nos toparemos con alguien que verdaderamente busque el bien para nosotros, y se alegre por nuestros triunfos. Por lo general, a las personas les encanta estar ahí presentes cuando fracasamos, para sentirse héroes, y consolar y dar consejos, que ellas son incapaces de seguir. Entonces, aunque suene feo, crudo, e intimidante, la realidad es que no podemos confiar en nadie, y si no luchamos y lo damos todo por nosotros, por cumplir nuestros sueños y realizarnos en la vida, no esperemos que alguien más venga a hacerlo.
Tenemos la capacidad de sobresalir, TODOS la tenemos. La diferencia está en las ganas, en el verdadero deseo de llegar lejos, de ser el mejor. No creo en coeficientes intelectuales, ni en niveles de educación... si bien es cierto, puede llegar a influir, jamás llegará a determinar algo, jamás será un factor definitivo e inalterable. Muchos de los grandes de la historia, jamás recibieron algún tipo de educación especializada, ni tuvieron a alguien que creyera en ellos y les echara la mano... No; Los grandes de la historia se abrieron camino ellos solos, por mérito propio, porque creyeron en ellos, se tuvieron fe, sabían que eran capaces de llegar tan lejos como se lo propusieran, y aprendieron a ignorar comentarios que simple y sencillamente buscaban derrumbar sus sueños, y servir de grillete a sus aspiraciones.
Personalidades como Los Beatles, Michael Jordan, Thomas Edison, Walt Disney, Steve Jobs... entre muchos. Ejemplos perfectos de superación, de tener fe en uno mismo. Rechazaron a los Beatles de disqueras, debido a que simple y sencillamente los productores no creyeron que las guitarras combinadas y sus voces, calarían bien dentro del gusto de la gente. Michael Jordan fue rechazado del equipo de Baloncesto de su instituto, Thomas Edison fue humillado por sus catedráticos, debido a ser considerado "estúpido" y poco capaz. Walt Disney fue despedido de un periódico, debido a su "falta de invención y su poca creatividad." Steve Jobs fue despedido de la empresa que el mismo ayudó a crear... Todos ellos (por mencionar sólo algunos casos), fueron personajes a quienes otros buscaron hacer trizas y derrumbar sus sueños. Personajes que vieron cerrar puertas en su cara, y que muy probablemente, tenían motivos de sobra como para tirar la toalla y dejarse vencer... pero no lo hicieron. Ellos creyeron en sí mismos, más que en lo que dijeran los demás. Ellos tenían metas claras, sabían hacía dónde iban, y sabían que con esfuerzo y determinación, lograrían llegar. El resto es historia.
¿Por qué no hacer historia nosotros mismos? sólo necesitamos aprender a creer, y desearlo un poco más, desearlo de verdad, determinarnos a conquistar las metas que nos hemos propuesto, y trabajar día con día por ser los mejores, por sobresalir.
No será de la noche a la mañana, llevará mucho tiempo, y requerirá mucho esfuerzo y sacrificio, pero valdrá la pena, esa sensación de haberlo logrado, cuando nadie creyó que podríamos hacerlo, NO TIENE PRECIO.
Y como decía un personaje al que llegué a admirar mucho... ¡Vamos que se puede!
-AdriannaRossi-
Tienes razón, toda la razón. Yo tengo el sueño de ser escritora y sé lo que es desear algo mucho. Creo que jamás podría humillar a alguien ni reírme de él por intentar algo que quiere con todas sus fuerzas. Tampoco sé si le ayudaría, a lo mejor no podría hacerlo ni sabría cómo, pero al menos no le diría o haría nada que pudiera hacerlo fracasar.
ResponderEliminarMuy buena entrada, buena reflexión, me ha gustado mucho :)
¡Talento tienes de sobra! lucha por tus sueños... todos los grandes comenzaron su camino sin tener nada más que eso, sueños. Un beso, y gracias por siempre leerme.
EliminarMe encanta esta entrada, me gustaría poder guardarla y leerla cada vez que deje de confiar en mi misma, aunque en el fondo sepa que si que puedo lograr todo lo que me proponga. Estas muy llena de motivaciones, que lo mejor de todo es que son reales.
ResponderEliminarMe ha encantado esta entrada, un beso enorme :D
Muchas gracias por tomarte el tiempo de siempre leerme. Me alegra mucho que te guste lo que escribo, y que te inspire y motive, que al fin y al cabo, es mi objetivo.
EliminarUn beso.
todo la razon .... porque no hacer historias de momentos a momento y que realmente no cueste nada un placer pasar a visitarte :) un abrazo
ResponderEliminarDicen que lo último que se pierde es la esperanza. El 2003 fue año difícil para mí, fue horrible, pensé en muchas cosas terribles pero una llamada de mi hermana me devolvió a la realidad, paciencia, ten fe, una fe sin obras es una fe muerta, claro, yo soy ateo, pero lo de las obras me dejo pensando, lo que tenemos que hacer es movernos para vivir, trabajar, esforzarnos. Y es que todos hacemos historia! Algunas son historias sencillas y humildes y otras más elocuentes, pero todos aportamos nuestro granito de arena.
ResponderEliminarqué linda entrada. Siempre me envuelven tus entradas niña!!!
ResponderEliminarBeso!
Gracias por tus palabras en mi blog!
Como siempre. Me encanta!
ResponderEliminarMucha razon en tu texto, pero el problema es q muchos dicen q hay q estudiar carreras como ingeneria, ir a conferencias para triunfar y hacen de lado a quienes ven las cosas diferentes. A veces siento q soy capaz de hacer lo q qiero pero a la par me desanimo yo mismo.
ResponderEliminarBuen text
Erik!
Excelente entrada. Todos tenemos sueños pero pocos son capaces de realizarlos y de llegar más allá. Unas de mis metas son: ayudar a la gente pobre; a las personas con síndrome de Down, autismo y asperger; a hacer que las personas seamos más tolerantes con nuestros semejantes ya que creo que ese es una de los grandes males de nuestra humanidad.
ResponderEliminarBesos y abrazos <3
Hola. Esta entrada me encantó.
ResponderEliminarTu blog es genial, te pasarías por el mío?: http://amgonnaliveloveandlaugh.blogspot.com.es/
Un beso guapa:)
¡Hola Adrianna! Una entrada exelente, escribes muy bien y eso resalta el blog. Sigue como hasta ahora llegarás muy, pero que muy lejos.
ResponderEliminar¿Te pasas por mi blog? No es, nada del otro mundo pero me haría mucha ilusión que leyeses algo. laubarbie09.blogspot.com
¡Un abrazo!